30Dic
2013
Escrito a las 8:26 am

Comunicación entre CEO y dircom

La publicación del post titulado “¿Qué espera un CEO de un dircom?” fue saludada por algunos lectores de Fábulas de Comunicación con la sugerencia de darle la vuelta a la pregunta y aventurarse por la senda de los deseos y las esperanzas: ¿Qué espera un dircom de un CEO?

Para responder he tenido que dejar atrás la humildad y atreverme por los caminos del management, esa disciplina que Peter Drucker elevó a la categoría de ciencia. La primera respuesta que me vino a la cabeza no tiene que ver directamente con la comunicación, sino con la gestión: que ejerza como consejero delegado. El propio Drucker afirmaba que la tarea directiva consiste en “establecer objetivos, organizar el trabajo, motivar a los empleados, comunicar, medir los resultados y gestionar a las personas”. Es decir, la gestión incluye la comunicación.

Esta es, pues, la respuesta básica. Si un CEO quiere hacer bien su trabajo, tendrá que comunicar bien. Y para hacerlo nada mejor que dejarse asesorar por un profesional de la comunicación, quien habrá de ganarse la confianza de su jefe para cumplir con tan exigente tarea. Comunicar bien no se refiere a sí mismo, a sus habilidades para transmitir ideas, sino al impulso de un diálogo abierto con todos los grupos de interés que facilite la creación de un clima favorable para el crecimiento de la organización.

La teoría del management ha evolucionado en los últimos años desde las materias duras, muy concentradas en la cuenta de resultados, hacia el poder de los “elementos blandos”, según el término acuñado por Sumantra Ghosal y Christopher A. Barlett, autores del aclamado ensayo “Managing across borders”. El indio Ghosal desarrolló el modelo de “las tres P” (Purpose, Process and People), en virtud del cual los directivos, con el CEO a la cabeza, necesitan crear “una ambición compartida entre su personal, inculcar los valores de la organización y proporcionar un significado personal a cada empleado”. Es decir, de nuevo estamos hablando de comunicación.

En consecuencia, lo primero que un dircom espera de un CEO es que considere a la comunicación como una función estratégica fundamental para la gestión sostenible y rentable de una organización. Tal expectativa implica que el dircom se siente en el comité de dirección o máximo órgano ejecutivo con voz y voto, no como un mero observador que toma nota de lo que se decide. Y también espera que el primer ejecutivo le consulte o al menos escuche su opinión antes de tomar decisiones de carácter operativo. Porque toda decisión, aunque sea rabiosamente operativa, tiene una dimensión intangible.

Una función es estratégica cuando se la dota de los recursos humanos y materiales adecuados para el cumplimiento de sus objetivos, es decir, personas y presupuesto. Aunque se trate de un «elemento blando«, el pensamiento estratégico, la capacidad de relación y la creatividad no son gratuitas.

Tras situar a la comunicación en el lugar que le corresponde, mi segunda expectativa respecto al CEO es que le pida a su dircom que piense en el futuro más que en el pasado. Comunicar un hecho relevante es relativamente fácil, incluso aunque se trate de una mala noticia; lo realmente difícil es pensar en cómo contribuir a la evolución de la organización a través de la misión, la visión y las conductas. Hoy la misión del dircom está sobre todo en la visión, concepto que, además, encaja con la dimensión financiera de los procesos de valoración de las empresas, basados en multiplicadores o descuentos de flujos de caja. El futuro posible atesora más valor que el presente.

La tercera expectativa es que le permita intervenir en la organización de su agenda desde la perspectiva de la comunicación interna y externa. Organizar la agenda implica también sistematizar el pensamiento que el CEO va desgranando en sus intervenciones, darle forma, convertirlo en piezas que puedan ser distribuidas por los distintos canales que gestiona la dirección de comunicación.

Tres tareas principales que van mucho más allá de escribir y distribuir notas de prensa, gestionar las relaciones con los medios de comunicación, dirigir la política de marca o elaborar los informes de gestión y de responsabilidad social corporativa. Estas son tareas tácticas que derivan del carácter estratégico de la función.

Cuando un CEO cree de verdad en la comunicación sienta al dircom a su izquierda de tal forma que éste pueda ver con nitidez lo que hace su mano derecha.

Nota: Estoy seguro de que los lectores de este post aportarán muchas y mejores ideas acerca de lo que esperan de su CEO o jefe.

8 comentarios

001
Jesús Falcón
30.12.2013 a las 13:55 Enlace Permanente

Tres cosas.

1.De mi jefe espero, en resumen, que sea consciente de que es más fácil corregir un error contable que un error de comunicación.

2.Mientras se siga confundiendo comunicación con publicación (hacer público) o informar, los directivos no serán conscientes de que la comunicación va vinculada estrechamente a la gestión de la empresa u organización.

3. El Dircom debe conocer de primera mano todos los procesos y sistemas, tanto de la empresa para la que trabaja, como del sector al que pertenece, de manera que sus recomendaciones puedan ser incorporadas al proceso de toma de decisiones de forma inmediata, si así se decidiese. Por su parte, el CEO debe conocer que toda decisión puede generar conflictos y por tanto permitir al Dircom hacer sus recomendaciones.

Saludos.

002
Carlos Molina
30.12.2013 a las 15:59 Enlace Permanente

No creas que hay tanto que añadir a tu post sobre lo que un dircom espera de un CEO, pero trataré de contribuir. Dentro de la función estratégica que el CEO debe reconocer al dircom, éste ha de contar con el apoyo del primer directivo para trabajar también con el resto de responsables de área de la compañía, involucrándolos en el desarrollo e implementación de las líneas generales del plan de comunicación y evitando así que la función comunicativa se divida. No son pocas las empresas en las que el Departamento de Marketing o el de RRHH tratan de implementar sus propias acciones de comunicación, alterando la línea estratégica de la empresa y restando capacidad de coordinación al dircom. Sin el apoyo del CEO, es difícil corregir estas situaciones.

003
JMV
30.12.2013 a las 17:44 Enlace Permanente

Estimado Carlos:
Estoy totalmente de acuerdo contigo. A veces nos aislamos del resto de departamentos o de las operaciones. El CEO debe recordarte que tenemos que estar cerca de ellos y ayudarles a resolver sus problemas o a mejorar sus procesos.
Muchas gracias por tu aportación.

004
JMV
30.12.2013 a las 17:45 Enlace Permanente

Estimado Jesús:
El dircom es un analista de contextos, que a menudo son determinantes para la toma de decisiones. Coincido contigo en que los errores de comunicación se suelen pagar más caros que los contables.
Gracias por contribuir al debate y al enriquecimiento de la profesión.

005
María
30.12.2013 a las 20:55 Enlace Permanente

Estoy totalmente de acuerdo, lo habitual es seguír confundiendo información con comunicacion y en cuanto un periodista estámos cerca, sólo ven notas de prensa y redacción.
Gracias Carlor ha sido una comunicación buenísima, me aporta mucho profesionalmente,
Un saludo

006
Luisa Alcalde
31.12.2013 a las 10:27 Enlace Permanente

Yo añadiría que un dircom espera de su CEO que comprenda tanto la trascendencia de la comunicación óptima en el crecimiento de su compañía, que valore y reconozca la profesionalidad de su dircom, que le implique en la participación de los derroteros por los que transita la empresa, que le motive y le rete para que aporte lo que sabe y lo que intuye.

007
JMV
31.12.2013 a las 19:18 Enlace Permanente

Querida Luisa:
Y viceversa: que el dircom le demuestre al CEO que la comunicación induce crecimiento.
Gracias por tu aportación.

008
JMV
31.12.2013 a las 19:19 Enlace Permanente

Confusión habitual entre información y comunicación que restringe la mirada a los medios. La visión siempre es más amplia.

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